La teoría materialista-idealista de Alexander Oparin se basa en las
condiciones de la Tierra primitiva, en la capacidad de interacción de los
elementos químicos que da lugar a compuestos más complejos, y en la evolución
gradual de la materia inorgánica a la orgánica, hasta formarse las primeras
células.
Oparin planteo una serie de procesos evolutivos que a través del tiempo
se han venido superponiendo y desarrollando cada vez más. Dichos procesos
evolutivos se iniciaron con la creación de la tierra primitiva y la atmósfera, a través de estos se fueron creando los compuestos orgánicos simples y la combinación
entre ellos mismos hizo que aparecieran unos más complejos surgiendo así las células.